¿Sin cubitos en el Mercadona? 5 formas sencillas de hacer hielo en casa (y sin cubitera)
Muchos consumidores se han encontrado con la sorpresa, no muy grata, de que falta hielo en supermercados y gasolineras. De hecho, algunas cadenas como Mercadona o Consum han limitado el número de bolsas de hielo que puede llevarse cada cliente.
Las fábricas de hielo no dan abasto para cubrir la demanda y la elevada factura de la luz y el precio de la electricidad tampoco ayuda a cubrir costes. Por ello, es bueno saber, en estos casos, 5 sencillas formas de hacer hielo en casa y sin una cubitera.
Seguro que puedes comprar una docena de huevos en el supermercado o ya tienes alguna en la nevera. Pues hacer hielo con esta técnica es tan sencillo como vaciar la huevera, cubrir los huecos con papel de aluminio, llenarlos con agua (sin pasarnos) y directo al congelador.
Después, al sacar los papeles, obtendrás unos cubitos de hielo perfectos para enfriar cualquier bebida y no estropearás el cartón de los huevos. Lo podrás reutilizar.
Otro método un poco más sofisticado requiere de vasos de cartón y vasos de plástico de chupitos. Así, se llenan de agua, por la mitad más o menos, los vasos de cartón más grandes y se incluyen dentro los vasos de chupito vacíos pegados en la parte de arriba por una cinta o celo. Después, se meten en el congelador.
Al sacar los vasos pequeños (despegarlos) y romper el cartón del vaso exterior, se obtienen unos vasos de hielo caseros ideales para tomarse una crema fría o un licor.
Si te gusta la repostería o tienes hijos/as es posible que tengas en casa varios moldes de plástico para hacer, por ejemplo, galletas. Con forma de flor, de animales, de estrellas...
Pues bien, estos moldes sirven, también, para hacer hielo. Sólo es necesario rellenarlos con agua y meterlos a congelar. ¡Listo!
Para los que no tengan muchos accesorios en casa, pero sí una botella de agua o una bolsa con cierre hermético, otra forma fácil y sencilla de conseguir hielo es rellenarlas y meterlas al congelador.
Eso sí, lo que se consigue es un bloque de hielo que, después, hay que romper en trozos con una maza, martillo u otro utensilio (incluso a golpes).
Una manera divertida, pero hay que tener cuidado, es usar globos de agua, rellenarlos (no del todo) y ponerlos a enfriar.
Después, al cortar el plástico del globo, conseguimos un bloque de hielo. Eso sí hay que tener en cuenta que nos quede un tamaño que quepa en un vaso, por ejemplo.
Y si, cualquiera de estos métodos no funcionan, siempre se puede acudir a comprar cubitos metálicos o cubitos de mármol para enfriar cualquier bebida. No suelen ser demasiado caros y son reutilizables.
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